El elixir de la juventud

Pie Derecho

Se trata de la segunda obra de esta temática que presenta el autor, y que no es más que una continuación de “Running. Tu terapeuta de confianza”, su primer libro. En Running. El elixir de la juventud, se describe a la perfección la moda actual por la práctica de esta disciplina deportiva, pero sobre todo se incide en los posibles riesgos y consecuencias que puede acarrear dicha práctica si no está en equilibrio con el resto de facetas de la vida de una persona. La familia, el trabajo, las amistades y otros proyectos personales, han de formar parte de esa coctelera, de tal forma que correr no se convierta en lo único y primordial en el día a día de una persona corredora.

Además, el hábito del running no viene solo, sino que normalmente se acompaña de un factor emocional reforzante que te hace querer tener más cantidad de retos y ser mejor corredor, y todo ello en un corto espacio de tiempo. Esto hace que la dedicación que antes ocupabas en correr, ahora sea insuficiente, necesitando como añadido sumar la práctica de otras disciplinas deportivas o invertir más horas de entrenamiento, para sentir que ninguna meta o carrera es inalcanzable. Añade por tanto un valor de crecimiento personal, al hilo de lo ya conocido en su anterior obra, sólo que esta vez, partiendo de aquello que puede ser peligroso por un exceso en la práctica de esta moda deportiva, te orienta para que se convierta en tu mejor aliado a la hora de sentirte y verte mucho más joven y capaz en muchas otras facetas de tu vida independientes de las de correr.

Es en definitiva un libro muy personal, donde el autor ensalza las enormes ventajas que una práctica controlada de este deporte puede provocar en tu vida, y es que como él mismo defiende “correr me ha hecho sentir mucho más joven, no sólo físicamente, sino en especial, emocionalmente”.

Cuenta con la colaboración en el relato del prólogo, de todo un campeón del mundo y de Europa en maratón, el atleta vizcaíno Martín Fiz. Sin duda alguna, todo un valor añadido para este ameno libro.

Tu terapeuta de confianza

Pie izquierdo

Cuando decidimos correr un maratón, no debemos tener prisa a la hora de elegirlo. El éxito del mismo depende en gran medida de la planificación de los entrenamientos y por eso, lo ideal es correrlo con la suficiente preparación para garantizarnos una finalización en el tiempo previsto, sin ningún tipo de riesgo, y sobre todo desde el convencimiento de poder disfrutar de tan particular experiencia. Lo mismo sucede con otras muchas decisiones a tomar en nuestra vida, no debemos tener prisa alguna para muchas de ellas.

La espera, el saber valorar cada pro y cada contra, puede jugar y de hecho jugará siempre a tu favor en la mayoría de las decisiones que la vida te lleve a tomar. Y es fácil decirlo, pero no tanto llevarlo a la práctica. ¿Quién nos enseña a ser más certeros en nuestro actuar diario?

La improvisación no tiene cabida en una preparación como la del maratón. Para empezar, debemos fijar claramente los días de entrenamiento y planificar cada semana de nuestra vida en base al mismo. Si se fijan cinco, seis o siete días de entrenamiento, estos deben ser reales, no pueden ser menos. Hay que tener muy claro por tanto qué es lo qué queremos y confiar en que lo vamos a conseguir, ya que el compromiso por nuestra parte ha de ser máximo y requerirá de un cumplimiento casi estricto del mismo.

La improvisación tampoco tiene cabida en nuestra vida cuando se trata de tomar decisiones importantes. Está claro que saber improvisar lejos de ser un defecto, es una virtud en mayúsculas, pero cuando toque improvisar, cuando de la improvisación obtengamos una ventaja competitiva, y no un lastre para el resto de nuestra vida.

Desde este texto, desde este escrito, lo único que se pretende es generar una similitud, un mundo paralelo, donde el correr y preparar un maratón, se convierta en tu mejor guía terapéutica para aprender a enfocar la vida con mayor disciplina y planificación. Correr, entrenar para un maratón, te hará pasar horas y horas con tus mayores miedos, te confrontará contigo mismo, y se convertirá en el mejor de los terapeutas que puedas tener. Eso sí, para ello, deberás seguir unas pautas, unos consejos, unas directrices, que aquí espero puedas encontrar.

Abrir chat
¿Hablamos?
Hola, ¿Hablamos?